Terapia del habla en Chicago: Cómo afrontar la tartamudez y desarrollar un habla sin tartamudeo

La tartamudez es bastante común en todo el mundo; se estima que al menos el 1% de toda la población sufre este trastorno del habla. Este trastorno tan común es algo que puede dificultar prácticamente el progreso de una persona en diversas situaciones, así como causar emocionalmente una incomodidad al hablar en público o en situaciones sociales.

La comunicación es algo que realizamos a diario, y cuando el mensaje no puede transmitirse con fluidez, puede ser increíblemente frustrante. La causa conocida de la tartamudez no es absoluta; algunos apuntan a la genética, mientras que otros afirman que se desencadena a través de estímulos ambientales o situaciones específicas. Independientemente de su origen, la tartamudez puede eliminarse a menudo con terapia del habla.

La tartamudez en El discurso delrey

Con el éxito de El discurso del rey, la película de 2010 ha sacado a la luz las luchas y los éxitos que soportan quienes tartamudean. La vergüenza y el pudor están ligados a este trastorno del habla. Muchos niños que padecen tartamudez tienden a volverse retraídos y tímidos, evitando la comunicación, lo que les afecta negativamente de diferentes maneras. Muchas personas diagnostican a los tartamudos como estúpidos o ineptos mentales. El estigma que se les impone puede obligarles a tener otros problemas de autoestima y situarles en una desventaja injusta para el resto de sus vidas. Como se muestra en la película, el rey Jorge VI de Gran Bretaña era un gobernante increíblemente apto, que sólo necesitaba terapia del habla. Si hubiera podido recibir esta terapia en su infancia, se habría evitado gran parte de su vergüenza.

Técnicas de terapia para ayudar a la tartamudez

Diferentes técnicas pueden ayudar a reducir o eliminar la tartamudez. Una de las técnicas consiste en la terapia emocional, que prepara a la persona para los sonidos o las palabras problemáticas y la orienta sobre los sentimientos que experimenta cuando tartamudea. Si la persona puede cambiar la forma en que el tartamudeo le hace sentir, la presión y el miedo a hablar con fluidez suelen reducirse. Otra técnica consiste en entrenar al individuo para que pronuncie palabras, sonidos y sílabas descompuestas para simplificarlas. Es casi como reentrenar la mente y la boca para formar el tono, el ritmo y las palabras. Por último, existe una ayuda similar al aspecto de un audífono, sólo que en lugar de amplificar el sonido, lo ralentiza y cambia el tono. Esta sensación coral permite al hablante sentir que está hablando con alguien o con un grupo de personas, aunque sólo se trate de su propia voz alterada.

Estas terapias deben ser evaluadas y realizadas por un logopeda. Cada vez surgen nuevas formas más eficaces de tratar la tartamudez, y un especialista capacitado podrá indicarte los mejores recursos para ayudarte con este problema del habla.