Logopedia de Chicago: ¿Cuál es la precisión del M-CHAT?

¿Qué es el M-CHAT?

El M-CHAT, o Lista de Comprobación Modificada para el Autismo en Niños Pequeños, es una prueba que se utiliza en niños pequeños de entre 16 y 30 meses de edad para detectar los Trastornos del Espectro Autista (TEA). Desarrollada y con derechos de autor por la Dra. Diana Robbins Ph.D. y traducida a más de 30 idiomas, la M-CHAT fue diseñada para que los padres la administren a sus hijos, pero actualmente también la administran los médicos en las citas de bienestar. Si realiza la prueba en casa, asegúrese de compartir los resultados con su médico de familia, independientemente del resultado.

En general, hay que recordar que esta es una herramienta que se utiliza para dar una imagen más clara de las condiciones o síntomas en cuestión, no la respuesta completa. Muchos han utilizado esto para identificar los problemas y dar el siguiente paso en las necesidades de atención médica de su hijo. Los desarrolladores de esta prueba todavía están trabajando en mejores formas de puntuar y hacer que la prueba sea la mejor fuente fiable posible, pero eso todavía dejará espacio para el error (al igual que cualquier otra prueba).

Tratamiento de los síntomas del autismo

El autismo en sí es un trastorno con una amplia variedad de síntomas para cada individuo diagnosticado; por eso se denomina un trastorno del "espectro". No existe un único tratamiento o cura para el autismo; sin embargo, hay terapias que se sabe que tratan y tienen más éxito con cada tipo de síntoma. El M-CHAT puede darles a usted y a su médico una idea más clara de qué área está más afectada su hijo. Dado que el autismo afecta al comportamiento social y al lenguaje, hay terapias correspondientes para desarrollar cada área.

Si su hijo no supera el M-CHAT, esto no confirma necesariamente el autismo. Aunque puede mostrar ciertos síntomas característicos de la enfermedad, también hay otros diagnósticos que presentan síntomas similares. Como siempre, hay que hacer un seguimiento con un examen médico por parte de un médico autorizado. Si uno o varios de los síntomas implican un trastorno del habla o de la comunicación, lo mejor es ponerse en contacto con un logopeda lo antes posible.